La nueva vida de una perra callejera que no se dejaba rescatar

Haseya llevaba meses sobreviviendo como podía en la calle: no dejaba que nadie se acercara a ella, escapaba hacia el desierto en cuanto lo intentaban. Hasta que un hombre decidió que sí o sí tenía que conseguirlo: gracias a su empeño y también a un dron, esta perra ahora tiene una vida feliz con compañeros perrunos y gatunos de los que no quiere separarse ni un momento.

Ahora ¡se queja si su humano deja de acariciarla!

Y también le gusta mucho cuando su mejor amigo gato, Jack, juega con ella :-)

Su mejor amiga es Marble, la perra que la ha enseñado a ser perra...

Ahora a veces pasan semanas sin verse porque sus humanos se han separado y ahora Marble vive con la humana pero, por suerte, siguen reencontrándose y las reuniones ¡son épicas!

Hay que ver lo que ha cambiado Haseya... Como veréis en el vídeo que The Dodo ha dedicado a su historia, no fue nada fácil pillarla pero él tenía claro que no iba a desistir. ¡Qué suerte ha tenido Haseya!

Y qué maravilla ver cómo, desde el minuto uno, ella confió en otros animales, incluso antes que en la persona que la había rescatado.

Porque, efectivamente, el proceso por el que la perra aprendió a confiar en las personas fue lento, pero gracias a Jack, el gato, y Marble, la perra, poco a poco sucedió:

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