Mis amigos peludos discapacitados (My Disabled Hairy Friends) así se llama la protectora que una mujer alemana, Sybille Morch, creó en 2021 la isla de Koh Samui, en Tailandia.
Ella es médico pero dedica todo su tiempo libre a ayudar a los perros: con ayuda de algunas personas voluntarias cuidan con mimo de una veintena de canes con problemas de movilidad.
En Koh Samui es también donde Niall Harbison ha creado un pequeño santuario, Happy Doggo, para ayudar a los perros de la calle. Y dado que él es un maestro en el manejo de las redes sociales (le siguen cientos de miles de personas de todo el mundo) también comparte la labor de Sybille para que así más personas sepan lo que hace y puedan ayudarla.
Y hace unos días juntos han organizado una pedazo de
Esperanza, amor y nunca rendirse: esto es lo que impulsa a Sybille... Y es impresionante ver el resultado de sus esfuerzos, la felicidad de todos estos canes que, gracias a ella, pueden disfrutar de la vida al máximo.
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