Margo tiene cinco años: la encontraron abandonada en la calle y fue llevada a una perrera. Sospechan que la perra no vivía en la calle sino que seguramente fue abandonada por su obesidad, cuando llegó casi no podía andar, pesaba más de 54 kilos cuando su peso ideal debería rondar los 29.
Tras pasar por el veterinario descubrieron que Margo tenía hipotiroidismo. Este desequilibrio hormonal se observa típicamente en perros de mediana edad o senior, y se produce más comúnmente en perros de razas medianas a grandes.
Entre los muchos síntomas que pueden hacernos pensar que un can tiene hipotiroidismo está el aumento de peso así como el cansancio, incapacidad para tolerar el frío y la pérdida de pelo...
En el caso de Margo, una mujer que es entrenadora personal -de humanos- que además es voluntaria en esa perrera tuvo clarísimo que con su aspecto de gran patata con patas, tenía poco a más bien ninguna probabilidad de ser adoptada. La perra no podía casi ni andar...
Por eso se ofreció para ser casa de acogida para esta perra, para ayudar a Margo a tener una vida normal.
En el vídeo podréis ver los avances prácticamente increíbles que ha logrado esta Pit Bull con su ayuda y con el tratamiento adecuado para su hipotiroidismo (que normalmente incluye la administración de hormona tiroidea sintética).
Margo, como dice su humana de acogida, volvió a ser una perra, así de fácil y de difícil.
Sus avances los ha ido compartiendo a través de esta cuenta de instagram. Es increíble ver el cambiazo que ha dado, ahora pesa 28.5 kg... ¡¡ha perdido más de 25kg!!
El siguiente paso es que encuentre una familia para siempre, algo que seguro que será mucho más fácil estando así de sana y estupenda y con la visibilidad que ha tenido gracias a su gran transformación.
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