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Un niño adoptado ofrece una enorme lección de amor al despedirse de su perra viejita

Un niño adoptado ofrece una enorme lección de amor al despedirse de su perra viejita

Última actualización del articulo el día 17/02/2020

Robbie sabe lo que es estar solo y no ser querido: este niño fue adoptado con tras años de abusos y negligencia, según explica Marcia Henry Gay su madre desde hace dos años. Por eso él siente una especial afinidad hacia los perros senior que su familia adopta: la "gente viejita" como los llaman. Y por eso al saber que Buffy, una de sus perras, estaba muy enferma, él eligió ser quien la abrazara mientras "se iba al cielo".

En un chequeo en el veterinario descubrieron que Buffy tenía insuficiencia renal avanzada: su familia decidió que no querían que la perra lo pasara mal, que sufriera, por eso optaron por la eutanasia.

Marcia se lo contó a Robbie y el niño de inmediato dijo que él quería ser quien la abrazara cuando ella fuera al cielo. Y así fue, Robbie acuno a Buffy en compañía de su madre.

Es un momento realmente duro y doloroso para todos, pero las palabras de este niño muestran una humanidad y una entereza que ya la quisieran muchos adultos: 

"Sé lo que se siente al no ser querido y no quiero que ningún animal mío se sienta así. Solo es triste para nosotros cuando van al cielo. Para ellos es un día feliz. Gracias por estar orgulloso de mí. ¿Estás bien, mamá? "

Robbie adora a los perros viejitos, a los que su familia siempre adopta. Y lo tiene claro, ellos le dan una oportunidad increíble a estos canes, igual que su familia a él. Como le dijo una vez a su madre: "Si vosotros hubiérais querido un bebé, nunca me habríais adoptado a mí. (...) Además, solo me conoces desde hace dos años y me quieres como si hubiera estado contigo siempre".

Normal que lo sucedido esté dando la vuelta al mundoy que miles de personas hayan felicitado a Robbie y a su madre por su generosidad.

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