Existe en Brasil (Sao Paulo cuenta con varios hospitales veterinarios públicos donde hasta las cirugías son gratuitas) y también es una realidad en la capital mexicana; en España se llegó a mencionar como propuesta durante la última campaña electoral pero ahí quedó la cosa, no se ha vuelto a saber nada al respecto. Lo que sí está en marcha es la atención veterinaria gratuita a personas vulnerables a través del proyecto Mejores Amigos de FAADA.
En México, sin embargo, sí que han dado un paso importantísimo para que sea una opción realmente ubicua: la reforma de la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente aprobada a final de 2023 ha entrado en vigor ahora y obliga a las autoridades federales a promover el establecimiento de Clínicas Veterinarias Públicasen todo el país, algo realmente útil dado que se calcula que en México hay 23 millones de perros y gatos en (y el 70% son callejeros).
Esto es lo que indica la ley: "Las entidades federativas en coordinación con los Municipios o, en su caso, las Alcaldías de la Ciudad de México, garantizarán en la medida de lo posible la esterilización gratuita de animales, y su trato digno y respetuoso en los centros de control animal, estableciendo las sanciones correspondientes para todo aquel que maltrate a los animales.
De igual forma, promoverán el establecimiento de Clínicas Veterinarias Públicas con el objeto de suministrar a los animales atención médica preventiva y, en caso de enfermedad, brindar tratamiento médico expedito avalado por un médico veterinario."
Esas son las buenas noticias, las no tan buenas están en la letra pequeña: el establecimiento de esa clínicas veterinarias públicas no será algo automático o necesariamente viable en todo el país dado que la propia ley indica que "estará sujeto a la disponibilidad presupuestaria de las entidades federativas y los municipios en cada ejercicio fiscal."
Aún así, si se incentiva e impulsa desde el Gobierno haciendo que se convierta en ley no debería quedar en papel mojado.
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