Hoy viernes 1 de abril ha habido novedades importantes en el caso de Luno, el perro que lleva más de dos semanas retenido en Barajas porque llegó a España sin estar debidamente identificado.
Dado que la normativa de acceso con animales de compañía a la UE es clara, cuando la veterinaria del aeropuerto detectó que no tenía microchip, prohibió la entrada al can. La dueña del Luno, Andrea, superada por la situación, se quedó a dormir en Barajas.
Fue días después cuando, al conocer que esta mujer llevaba una semana viviendo en el aeropuerto, la asociación AGERAA y el equipo legal de PACMA se involucraron para tratar de solucionar esta pesadilla burocrática.
Siendo conscientes de que era responsabilidad de Andrea haberse informado correctamente antes de emprender un viaje de estas características el objetivo era reconducir la situación de la manera menos traumática posible para todos, incluyendo Luno. Es decir, que se regularizara su situación, que le pusieran el chip y pudiera pasar una cuarentena, etc.
El proceso ha sido muy cuesta arriba para todos, especialmente para el pobre Luno. En palabras de la Presidenta de AGERAA ha sido, directamente, un calvario y lo que es peor, un calvario evitable.
Como compartimos en su momento, desde el Ministerio de Agricultura directamente exigían la expulsión del perro a Costa Rica, el país en el que hicieron escala antes de volar a Madrid, no daban ninguna alternativa.
Entonces AGERAA impuso un recurso que se tradujo en que, a última hora, un juez paralizó ese proceso.
La buena noticia era que Luno seguía en Barajas, no sería expulsado, pero tal y como denunciaban desde PACMA, Andrea pudo ver a su perro solo "10 minutos y bajo vigilancia. Con un trato absolutamente denigrante, como si de una delincuente se tratara, la veterinaria del Área de Sanidad Animal del Ministerio de Agricultura se atrevió a poner en duda la identidad de Andrea; decía que no era ella, incluso presentando su pasaporte se cuestionaba que fuese la titular de Luno."
El revuelo organizado en redes sociales por el #CasoLuno y el trato que estaba recibiendo en el aeropuerto ha sido tal que ha llegado incluso al Parlamento en Ecuador, el país de origen de la dueña del can.
"Brindaremos el apoyo necesario para la pronta liberación de LUNO, que lleva 18 días en cautiverio en el aeropuerto de Madrid - Barajas.
Solicitaremos a las autoridades de Ecuador, impulsar las acciones oportunas y pertinentes para preservar la vida e integridad de LUNO, perrito de propiedad de nuestra compatriota Andrea Torres."
Y por fin esta mañana ha habido novedades. Este es comunicado que ha compartido Sergio García Torres, responsable de la DG de Derechos de los Animales, en su cuenta de instagram, una noticia que, por cierto, no ha sido aún transmitida oficialmente ni a Andrea ni a las abogadas que llevan su caso:
"El perro ni será sacrificado ni se muere.
La grave imprudencia de llevar a otro país a un animal sin identificar ni vacunar y que después se sumen otra serie de situaciones (alguien vacunó al perro de manera irregular estando en barajas) hacen que sea imposible realizar examen de anticuerpos para saber si tenía vacuna previa.
Luno saldrá de Barajas y tendrá que realizar cuarentena en un centro. Su vida no corre peligro.
Existen normas que hay que cumplir, la identificación de animales es la primera de ellas, algo que en el día a día de nuestro país lo criticamos mucho cuando se encuentran animales sin identificar. En este caso la situación es aún más grave, porque se realiza un viaje largo con él y se le pone en riesgo con semejante irresponsabilidad."
Dejando a un lado las acusaciones sobre irregularidades cometidas en Barajas -esperemos que en el juicio se aclare lo sucedido en este caso- la buena noticia es que Luno, por fin, podrá salir de la jaula en la que estaba retenido en Barajas e ir a algún centro para pasar una cuarentena.
Pero aún no ha terminado su pesadilla. Parece que por el momento Luno irá a algún Centro de Protección Animal, a un chenil, y aún está por ver qué decide la justicia.
Lo que no ha explicado Sergio García Torres es que la Administración sigue insistiendo en que hay que expulsar a Luno.
Esta es la resolución que han recibido en AGERAA y que nos han hecho llegar:se ha desestimado el recurso contra la expedición del perro, tan solo aceptan que salga del aeropuerto mientras esperan la resolución de la jueza que está a cargo del caso.
Y, por otro lado, pese a que tanto AGERAA como otras asociaciones se han ofrecido para ocuparse de Luno de manera gratuita mientras se resuelva oficialmente su situación, por el momento parece que no será posible: Luno irá al CPA de Madrid y su dueña tendrá que correr con los gastos de su estancia en la perrera municipal.
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