• Compartir
  • Whatsapp de SrPerro

Los perros de intervención vuelven al Hospital de la Axarquía para dar soporte emocional a sus pacientes pediátricos

Los perros de intervención vuelven al Hospital de la Axarquía para dar soporte emocional a sus pacientes pediátricos

Última actualización del articulo el día 19/12/2021

Jaki, Piruleta, Ginny y Churrete están encantados de regresar al trabajo y sus "clientes" aún más de volver a tenerlos cerca: estos canes son los encargados de alegrar a los niños en el Hospital de la Axarquía a través del Programa de Intervención Asistida con Perro (IAP) ‘Huellas en el Corazón’.

Tras dos meses de ausencia por protocolo Covid, vuelven a soporte a los pacientes pediátricos y a los menores que acuden al centro, y ahora también para apoyar la consulta de enfermería y en el debut diabético infantil.

El programa ‘Huellas en el Corazón’ de la entidad de intervenciones asistidas Perruneando avalado por la Cátedra Animales y Sociedad de la Universidad Rey Juan Carlos, se desarrolla desde el pasado mes de octubre de 2020 en la Unidad de Pediatría del centro hospitalario, como una actuación integrada en su Plan de Humanización.

Tras contrastar los beneficios sobre el control de la ansiedad, la intervención con perros se extiende a enfermería y al debut de la diabetes infantil.

El programa puede atender a menores desde los ocho meses hasta la adolescencia, si bien la franja de edad más frecuente de las 30 intervenciones realizadas durante los 12 primeros días en el Hospital de la Axarquía ha sido entre los tres y los 10 años.

 

Las actuaciones de los perros y los profesionales de ‘Huellas en el Corazón’ aportan soporte emocional en diferentes áreas pediátricas del centro, principalmente en las estancias hospitalarias y las consultas de pediatría. La interacción con los perros, en estos casos, consigue reducir los niveles de estrés y ansiedad de los menores, así como el dolor y autoconcepto durante el tiempo de hospitalización o el previo a la consulta médica.

 

La presencia del perro es apreciada también para abordar determinadas técnicas médicas y de enfermería gracias a los estados de calma que ayudan a generar en los niños y niñas. Por este motivo, el programa se va a extender al área de enfermería.

Asimismo, el Servicio de Pediatría ha considerado incluir las intervenciones con perro en las consultas de debut de diabetes infantil. El diagnóstico de una enfermedad crónica que además introduce cambios en los hábitos de vida, como ésta, puede afectar al estado de ánimo del niño/a diagnosticado y de su entorno.

Tan importante como abordar la enfermedad es considerar los factores emocionales que se desencadenan cuando se conoce el diagnóstico y se inicia el proceso de adaptación, un momento adecuado para contar con el soporte emocional que aportan los perros. Además, su compañía contribuye a generar en los menores una imagen positiva del hospital, al que van a estar ligados por el carácter crónico de su enfermedad.

El equipo de ‘Huellas en el Corazón’ está formado por terapeuta ocupacional, pedagoga terapéutica y trabajadora social con el acompañamiento de los perros de intervención Jaki, Piruleta, Ginny y Churrete.Los cuatro conforman un grupo heterogéneo de animales en cuanto a aspecto, edad, tamaño, temperamento y raza/no raza; todos son adoptados y el entrenamiento les ha capacitado para la labor que realizan, que ellos viven como un juego.

 

El programa cuenta con el apoyo y participación del equipo médico, enfermería y auxiliar de la Unidad de Pediatría, que facilitan la disposición de espacios donde desarrollar el programa y colaboran en la valoración del impacto de la intervención sobre los menores que participan.

Dichas valoraciones serán analizadas por los investigadores de Perruneando y la Cátedra Animales y Sociedad de la URJCpara saber más sobre el impacto positivo de la interacción con perros en el entorno hospitalario. La directora de la Cátedra, Nuria Máximo, afirma que “este proyecto supone una nueva aproximación de las intervenciones asistidas con perros en el entorno hospitalario: los perros y sus guías ofrecen a los menores que acuden al hospital el soporte emocional que necesitan para afrontar con mayor fortaleza los cuidados que los sanitarios les proporcionan”.

En el mismo sentido, la terapeuta ocupacional y directora técnica de Perruneando Málaga, Macarena Martín, afirma comprobar en cada sesión que “la presencia de nuestros perros hace que los menores se olviden del entorno dónde se encuentran, haciendo su estancia hospitalaria más divertida y estimulante. Lo que más nos reconforta como profesionales es escuchar de un peque, mientras abraza a una de nuestras perras de intervención, decirle… ‘Gracias, Jaki. Te quiero’”.