Una mujer le envió al responsable de ACT, Animal Care Trust, una asociación que rescata animales en Taiwán, una foto de un perro jovenzuelo herido, el can estaba acurrucado en un horno de metal junto a una casa de huéspedes en el Parque Nacional Taroko, en Taiwán. Al parecer había perdido una pata en una trampa y tenía otra pata con una grave lesión, posiblemente por la misma razón. Por lo visto, según explica Seán McCormack, en Taiwán hay un gran problema con ese tipo de artilugios: "La mayoría de nuestros rescates son perros que han sido mutilados por uno de estos dispositivos".
Rescata a una perra viejita y ciega que llevaba 8 días perdida... y además ¡dona la recompensa!
Seán le aseguró a la mujer que iba a rescatar al perro, sin saber realmente cómo llegarían hasta allá.Les habían dicho que era una caminata de unas seis horas pero ellos pensaron que podrían ir en coche...
Pronto descubrieron que era imposible, tendrían que ir a pie. Seis horas por un camino empinado y resbaladizo. Y una vez que llegaron allí y, por suerte, lograron encontrar al perro, vieron que necesitaba ayuda veterinaria urgente así que no tuvieron más remedio que emprender de inmediato el camino de regreso, otras seis horas andando.
El can, ya lo veréis, parecía estar esperándoles... encantado de ser rescatado, un buenazo que ha tenido una enorme suerte. Se ha recuperado a la velocidad de los perros y ¡ya hay quien quiere adoptar a Sandy, como le han llamado!
ACT ha rescatado a unos 1500 animales en los últimos 19 años, una labor realmente impresionante. Podéis conocer más sobre esta asociación en su web y redes sociales donde también se dedican a educar y concienciar.