Hay que ver lo mucho que se disfruta viendo a un perro feliz, ¿verdad? Esa manera de disfrutar el aquí y ahora, esas ganas por compartirlo contigo... Son el mejor antídoto contra el mal humor. Y, de propina, un perro feliz es, con mucha frecuencia, un perro sano: porque tiene cubiertas todas sus necesidades, no sólo la comida y el paseo, también el juego, la socialización con otros canes, el cariño... Esa es la premisa que quería fomentar una empresa de seguros regalándole a tres perros su día perfecto.
El "Happy Dog Project", El Proyecto del Perro Feliz consistía en regalar a los ganadores de un concurso el día de sus sueños.
Comenzamos con Duncan Pickles y Scrappy Nelson, dos Border Terriers que adoran la nieve pero que casi nunca pueden disfrutar de un invierno blanco en condiciones
¡Cómo se lo pasan! Y gran idea esa de colocar huesos o chuches en vez de nariz y brazos en los muñecos de nieve...
Y luego tenemos a Oakley, un loco de la pelota. ¿Cómo conseguir que sea extra feliz? Pues... invitándole a un partido con un par de futbolistas y varias pelotas.
¿Cómo sería el día perfecto para tu perro? Además de regalarle un "día del sí" ¿qué otras sopresas te gustaría poder darle?