Este incidente hace unos días en un parque de Nueva York: Dora Marchand había salido a pasear a sus perros por Riverside Park y cuando volvía a su su apartamento -donde se ha mudado recientemente desde San Francisco- un agente de la Patrulla de Parques de la ciudad la paró por llevar a sus perros Comet y Sophie sin correa.
La normativa en este parque es clara, salvo en algunas áreas concretas, los canes han de ir atados.Eso es indudable pero también parece importante mencionar que los perros de Marchand no habían hecho absolutamente nada, no habían atacado a nadie, ni siquiera se habían acercado a nadie, estaban junto a su humana porque están acostumbrados a esto: habían estado jugando en la hierba un rato y justo iban de vuelta para casa.
En ese momento, un agente vio que iban sueltos y se acercó a indicarle a Marchand que debían ir con correa. En principio todo iba a quedar en eso, en una llamada de atención, pero entonces llegó otro policía y el asunto se convirtió en una pequeña pesadilla para Dora Marchand: ella había salido de su piso sin su cartera o su móvil por lo que no pudo enseñar su carnet de identidad, como le pedían, y por eso... acabó siendo esposada y detenida.
La escena la grabó un hombre que estaba haciendo deporte en el parque. A él le pareció del todo excesiva la actuación de los agentes que no solo esposaron a Marchand sino que la tuvieron así al menos una hora... Y, según comentó, no vio en ningún momento que ella opusiera resistencia.
Esposada, de pie, y a la espera de ver qué hacían con los perros que iban sueltos, dos Pastor Australiano Miniatura que se comportaron con total tranquilidad durante todo el tiempo.
Según cuentan en West Side Rag, un periódico local, Marchand pudo contactar con su novio gracias a que otra persona le dejó usar su móvil. Así él pudo ir al parque a por los dos perros porque la policía estaba intentando -sin éxito- meterlos en dos jaulas.
El novio de Marchand también trajo su cartera con el carnet de identidad pero... ya era demasiado tarde: los agentes dijeron que tenían que llevarla a comisaría y eso es lo que sucedió.
Los comentarios en redes sociales no han cesado con un debate entre los que consideran que es su culpa por haber incumplido las normas y los que opinan que aún así, los agentes se han excedido.
Un incidente absolutamente menor que podría haber sido gestionado mucho mejor. Marchand fue puesta en libertad tras pagar una multa de unos 500 dólares.
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