Ike es un Pastor Alemán juguetón y simpático de dos años: su familia adora a este can que fue encontrado abandonado siendo un cachorrote de seis meses y al que Ethan Cole y su madre adoptaron. Hace unos días Ike les dejó con la boca abierta a ambos y la escena, que Cole captó con su móvil cuando ya llevaba un rato sucediendo, se está haciendo viral desde entonces.
Esta pareja no se conocía de nada, obviamente y es probable que Ike nunca antes hubiera visto a un ciervo.
Ethan Cole al principio pensó que su perro estaría persiguiendo al ciervo y entonces... bueno, mejor verlo :-)
¡Cómo disfrutan de ese juego improvisado!
Y no es ni la primera ni la última vez que sucede, claro, porque hay perros que demuestran sus ganas de jugar con quien sea y como sea. Con todo tipo de animales y también con seres inanimados:
