Por suerte, Lena nunca sabrá que alguien quería que la matasen: esta cachorrota fue entregada en Santa Fe Animal Shelter con una nota que decía que "estaba rota" y pedían que fuera sacrificada. La perra no podía andar, arrastraba sus patas traseras pero eso no le impedía ser una jovenzuela feliz. Tras una revisión veterinaria encontraron cuál era el problema y decidieron operarla y, por supuesto, en ningún momento se planteraron la eutanasia.
Lena recibió toda la ayuda veterinaria que necesitaba, tuvo que pasar por dos operaciones pero todo salió estupendamente, como veréis en el vídeo. No solo eso, ella tuvo la enorme fortuna de ir a una casa de acogida especial donde ayudaron enormemente a la perra con toda su rehabilitación.
Y... sí, fue uno de esos estupendos casos de "casa de acogida fallida", como dicen los americanos. Lena ha sido adoptada por esta estupenda familia.
Es fácil acabar dando palmas al ver el vídeo :-)
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