Cassius es un cacho de pan, según cuenta su familia: es un Rottweiler amoroso y curiosón que solo tiene un pequeño problema: no le gusta el agua y, pese a que lo han intentado de mil maneras, no sabe nadar, no han logrado que aprenda.
De ahí la escena de infarto que protagonizó un día y que quedó grabada por las cámaras de seguridad de su casa: el can se resbaló y cayó a la piscina en un momento en el que estaba solo en el patio y cuando la única persona que había cerca era su humano, Darren Thomas, que es paralítico.
Thomas es conocido por su activismo a través de redes sociales, por su actitud positiva y luchadora tras el grave incidente que le dejó en una silla de ruedas, tras un disparo a bocajarro en un intento de robo.
Por eso también compartió este vídeo en el que se puede ver cómo, con maña y sin perder los nervios, logró salvar a Cassius de un accidente que podría haber acabado muy mal.
Aunque la piscina tiene escalones que le hubieran permitido salir sin mayor problema, como Cassius odia el agua y no sabe nadar, entró en pánico. Solo la pericia de su humano, llevándolo hacia las escaleras por la pata, dado que no podía cogerlo, logró obrar ese milagro.
Cassius es de secano y punto: él es más de pegar brincos a ver quién pasea cerca de su casa :-)
Como veréis en este otro simpático vídeo, Thomas trata de animar a todas las personas que siguen sus redes a vivir el momento, a disfrutar y hacer el ganso si hace falta, porque nunca sabes cuándo la vida te puede dar una golpetazo.
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