Sucedió en España con Urko y ahora ha sucedido en Colombia con Sombra: los perros antidroga son demasiado eficaces para el gusto de aquellos que se lucran con el millonario negocio del narcotráfico. Claro que los cárteles de la droga en Colombia están en otra liga con respecto a los traficantes de Paterna, en Valencia: ellos no solo amenazan de muerte sino que han puesto precio a la cabeza de Sombra con una recompensa de 60.000 € para quien capture o mate a la perra.
Sombra hace muy bien su trabajo, para algunos demasiado bien: esta Pastor Alemán de seis años ayuda a la policía de Colombia en su lucha contra el narcotráfico y los cárteles de la droga. Ella ha conseguido detectar toneladas de cocaína oculta, drogas que hubieran generado un beneficio millonario para el Cartel del Golfo. Y por eso mismo Otoniel, líder de esta organización criminal, ha puesto un precio a su cabeza, 60.000 €.
Sombra ha sido trasladada para garantizar su seguridad, antes estaba en Antioquía y ahora opera en el aeropuerto de El Dorado, en Bogota, donde vigilan para que no pueda sucederle nada. Y donde la perra sigue siendo clave para localizar grandes alijos de droga. De hecho, Sombra ha recibidodos años consecutivos la medalla Wilson Quintero, una condecoración por su aportación en la lucha contra del tráfico de drogas.
