Os lo contamos hace unas semanas, hay una petición abierta en Change.org para pedir a El Corte Inglés que deje de vender animales vivos en sus instalaciones. Claramente muchos se lo agradecerían si, finalmente, optaran por escuchar esta demanda, ¡más de 100.000 personas han sumado su firma a esta petición!
La petición, creada por Olga Porqueras, llegó pocos días después de que también nosotros mostráramos nuestra sorpresa al descubrir que en un centro asociado a El Corte Inglés se vendían cachorros.
Es un tema recurrente, especialmente en Navidad, ante el temor de que se compren perros de forma poco responsable, sin tener en cuenta todo lo que esa decisión conlleva. Ante el temor de que muchas de esas compras puedan terminar en abandonos.
La ley permite la venta de animales en tiendas aunque en algunas Comunidades sí está prohibido que estén expuestos a la calle en escaparates con el objetivo de limitar la compra por impulso y, también, de garantizar que los animales, cachorros casi siempre, se encuentren en las mejores condiciones posibles.
¿Por qué pedir a El Corte Inglés que deje de vender animales si muchas otras tiendas lo hacen? Precisamente por el poder simbólico y la repercusión que tendría esa decisión, porque se trata de una de las marcas más importantes en España. Si ellos tomaran una decisión así, sería noticia. Una gran noticia.
En la petición se explica así:
"Tenemos las perreras llenas, miles de perros y gatos están buscando el calor de un hogar. Si ustedes dejan de vender animales a corto plazo, los que realmente quieran un animal recurrirán más fácilmente a una perrera o a un centro de acogida, a medio largo plazo contribuirán a la limitación de la sobrepoblación, mostrarán un espíritu progresista más en consonancia con el Tratado de Lisboa que reconoce a los animales como seres sensibles y se ganarán las simpatías de millones de personas - y creciendo- a los que nuestra condición de humanos nos obliga a preocuparnos por los animales."
Lo cierto es que este debate no se da sólo en España, por desgracia el problema de los abandonos y la saturación de perreras y protectoras afecta a muchos otros países. Igual que el problema del contrabando y venta de perros criados en condiciones lamentables, lo que en EEUU se conoce comopuppy mills: hace unos días el Seprona interceptó 125 cachorros que provenían de Europa del Este e iban a ser vendidos en tiendas de Zaragoza.
En Canadá y EEUUcada vez más ciudades se plantean prohibir la venta de animales en tiendas, salvo que sean perros o gatos de protectora: la última en anunciar esta prohibición ha sido Phoenix, Arizona y aquí podéis ver una lista con más ciudades. En el caso de Alburquerque, por ejemplo, el dato es claro: desde que se prohibió la venta de animales de compañía se ha reducido en un 35% el número de eutanasias en perreras.
En España aún estamos lejos de ese tipo de mentalidad pero si El Corte Inglés diera un paso en esa dirección, tendría un eco más que considerable.
Si en menos de un mes 20.000 personas han sumado su firma a la petición... y han llegado a recoger 100.000 firmas meses después, claramente, se ganarían a miles de personas en caso de que escucharan esas voces. Nosotros, desde luego, les haríamos la ola todas las veces que hiciera falta.
