• Compartir
  • Whatsapp de SrPerro

La historia del perro que mordió a un niño y "La Niña que sabía de Perros"

La historia del perro que mordió a un niño y

Última actualización del articulo el día 11/01/2017

Hace tiempo os hablamos de Padi, un perro que ha estado a punto de ser sacrificado tras haber mordido a un niño. ¿Era un can agresivo y problemático? No. Se llevaba bien con adultos, niños y otros canes y nunca antes de ese inicidente había mostrado ningún tipo de agresividad. Su historia, que os recordamos a continuación, pone de relieve la crucial importancia de enseñar a los niños cómo interactuar de forma segura con los perros, con los de su familia y sobre todo con los canes desconocidos. Para ello os recomendamos un nuevo libro recién publicado: La niña que sabía de perros

¿Qué pasó? Su cuidadora estaba despistada y permitió al niño jugar sin supervisión con un perro desconocido.

El niño, que no sabía de perros, no se percató que estaba asustando al can, lo tenía acorralado bajo una mesa. Y Padi, que no sabía ya cómo defenderse, le mordió en una oreja.

Como la herida sufrida fue grave -puntos y varias operaciones de reconstrucción- la ley en Florida, donde ocurrió esta historia, indicaba que el perro debía ser sacrificado.

Las autoridades se llevaron a Padi y lo metieron en un chenil del centro de protección animal, con la etiqueta de "perro peligroso".

Ya os lo contamos en su momento: el dueño de Padi, un veterinario, movió cielo y tierra para demostrar que el can no era ni agresivo ni peligroso, que había sido un incidente aislado, achacable al miedo del perro y a una situación muy mal gestionada. No merecía morir por ello.

En verano dejaron que Padi volviera con su familia.Y ahora, finalmente, la justicia les ha dado la razón: un juez ha determinado que la decisión de sacrificar al perro era inconstitucional.

No es lo mismo, ha dictaminado el juez, un perro que muerde sin ser provocado que un can que muerde para defenderse. 

Esa decisión se traduce en que Padi puede estar tranquilo y, además, en que se establece un importante precedente que podría ayudar a otros perros en esa situación. La justicia deberá escuchar las razones por las que han mordido, no dictaminar automáticamente su eutanasia.

Es realmente importante enseñar a los niños pequeños cómo comportarse cuando hay perros a su vera, tanto canes que puedan conocer como los perros que se encuentran por la calle o en los parques. 

Ese es el objetivo de este cuento tan bonito y útil, el que ha escrito Sumara Marletta, una estupenda educadora canina que, además, es madre de dos niñas y sabe cómo explicar las cosas para que los canijos de la casa las entiendan y recuerden.

Todas las ilustraciones del libro son consejos visuales, permiten captar el mensaje de forma casi intuitiva. 

Los perros no son peluches, hay que aprender cómo tratarlos: sin achuchar, sin agobiar, sin correr delante de ellos, sin molestarles cuando están durmiendo o comiendo... pautas básicas pero cruciales. 

Sin duda, un regalo estupendo para cualquier familia en la que convivan niños pequeños y perros.

Su guía de convivencia básica para niños y perros felices, la que encontraréis al final del libro, debería estar impresa en los colegios, desde luego. 

Aquí podéis encontrar nuestros consejos prácticos para saber cómo mejorar la convivencia entre perros y niños: es una buena idea enseñárles a "hacer el árbol" si tienen miedo (quedarse muy quietos con los brazos pegados al cuerpo), que sepan cómo saludar a los canes y cuando no conviene molestarles (cuando comen o duermen)...

Esta fantástica ilustración de Lili Chin es también una estupenda guía para que los niños entiendan cómo acercarse a un can.

 

>> La niña que sabía de perros en Amazon.es