A partir de enero 2016, en EEUU se van a analizar todos los casos de maltrato animal de forma minuciosa. El FBI reconoce así la gravedad de este tipo de delitos y el impacto negativo que tienen sobre la sociedad: de hecho, el maltrato animal pasará a considerarse un "crímen contra la sociedad". Ojo, no es que aumenten las penas, pero sí se ha dado un gran paso en la dirección correcta.
Hay datos que demuestran que la crueldad con los animales puede ser uno de los principales indicadores de futuros crímines violentos, también de la violencia de género, de ahí que el FBI lleve tiempo queriendo analizar mejor toda la información relacionada con el maltrato animal.
Hasta ahora era imposible saber si el maltrato animal iba en aumento o cómo y dónde sucedía. Ahora en EEUU la situación cambiará drásticamente.
A partir de 2016, la policía tendrá que facilitar información sobre cualquier incidente relacionado con el maltrato animal. Y todos los incidentes quedarán identificados en una base de datos del FBI dentro de cuatro posibles categorías: abandono/neglicencia, abuso intencional/tortura, abuso organizado (peleas de perros, etc.) y abusos sexuales a animales.
De esa manera será posible monitorizar y analizar la información sobre maltrato animal y actuar de forma más efectiva.
Además, al pasar a ser considerado un "crimen contra la sociedad", se reconoce la gravedad del maltrato animal y aunque cada estado tiene su propia legislación, será bastante más viable el poder actuar en estos casos.
