Los muchísimos canes que tienen pánico al ruido de los petardos, si pudieran, seguro que dirían ¡guau - gracias! al Ayuntamiento de Vitoria y considerarían pasar fin de año en esta ciudad. Por segundo año consecutivo, atendiendo a la petición de una asociación animalista, en esta localidad se va a limitar el lanzamiento de petardos y cohetes en Nochevieja.
Según recoge el Bando publicado por el Ayuntamiento de Vitoria, se tolerará "la utilización y el lanzamiento en la vía pública de petardos, tracas, cohetes, bengalas y cualquier otro artículo pirotécnico el 1 de enero de 2015, coincidiendo con la entrada del Año Nuevo, entre las 00.00 y las 00.15 horas"
Es decir, quince minutos de estruendo y luego tranquilidad.
Quince minutos para que los que optan por esa forma de diversión puedan hacerlo y a partir de ahí, tranquilidad para el resto. Si a alguien le da por seguir lanzando petardos pasadas las 00:15, podrá ser sancionado.
El objetivo, también lo indica el bando, es proteger tanto a los animales como a las personas que puedan verse afectadas por los ruidos extremos y los sobresaltos.
No es que crea que los Ayuntamientos deban poner multas por todo pero... me parece una gran iniciativa. Para empezar quizá sirva para revelarle a muchos un problema que, quizá, desconozcan: los canes pueden pasarlo realmente mal, hasta niveles insospechados de mal.
Sería realmente maravilloso que muchos otros Ayuntamientos decidieran escuchar al miedo de los perros y limitaran también el uso de petardos.
Muchos -yo desde luego- se lo agradecerían.
+ info: Consejos básicos en época de petardos.