Después de conocer la historia del heroico Yorkie que logró salvar la vida de su humano, caído por un talud, ahora tenemos a otro pequeño perro cuya presencia ha sido indispensable para salvar a su tutor.
Sucedió en el glaciar Fee, en Suiza, a comienzos de julio: un hombre estaba caminando con su chihuahua cuando, de repente, cayó en una profunda grieta y quedó atrapado en el hielo glaciar.
Por fortuna, explican los rescatistas de Air Zermatt, el hombre accidentado llevaba un walkie-talkie de uso amateur, con el que pudo pedir auxilio. Una persona cercana recibió su llamada de emergencia por casualidad, pero no pudo localizar el lugar exacto del accidente.
A las 15:00 h, un equipo de Air Zermatt despegó en dirección al glaciar Fee con tres especialistas en rescate de KWRO a bordo. Una vez allí, la búsqueda del lugar del accidente fue complicada: el glaciar era extenso y el agujero apenas visible.
Entonces ocurrió algo crucial: uno de los rescatistas vio un pequeño movimiento sobre una roca: ¡el chihuahua!Justo al lado estaba el agujero por el que el hombre había caído a la grieta.
Gracias al comportamiento del perro, el equipo pudo localizar el punto exacto del accidente. Los rescatistas descendieron con cuerdas hasta el herido y lograron rescatarlo. El paciente y su perro fueron trasladados en helicóptero al hospital de Visp.
El pequeño perro no se movió del lugar durante toda la operación (podéis verle en la foto de abajo, sobre la piedra) y siguió cada movimiento de los rescatistas con atención. Los rescatistas no lo dudan: "se puede decir con toda certeza que su comportamiento fue clave para que el rescate tuviera éxito. El perro es un héroe de cuatro patas que, posiblemente, salvó la vida de su tutor en una situación de peligro extremo."
Como podéis ver por las fotos que han compartido, el hueco por el que había caído el hombre es mínimo: sin su perro, hubiera sido imposible encontrarle.
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