El colegio Delia Zapata Olivella lleva más de una década ayudando a perros y gatos que realmente lo necesitan gracias a la idea de la profesora Andrea Cristina Murcia: tras rescatar a Mickey, un can maltratado que malvivía en la calle, se convirtieron, poco a poco, en casa de acogida para otros animales.
Cerca de 600 animales han encontrado una familia gracias a 'Amigos de cuatro patas', como se llama la iniciativa desarrollada por este centro educativo de Bogotá, Colombia.
El programa, evidentemente, es beneficioso para los animales rescatados pero tiene otra importante labor: la educación, puesto que los alumnos se involucran en el cuidado de los perros y gatos.
"Lo que hacemos es educar a los estudiantes en cuanto a la tenencia responsable, pero en ese proceso ellos fortalecen habilidades educativas, orales y de autoestima. Es ver cómo ese perrito o gatito que rescatan y cuidan hasta el feliz término de la adopción también transforma en ellos muchas cosas", explica Andrea Murcia.
Una iniciativa doblemente beneficiosa, ¿no os parece?
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