Los perros miniatura pesan menos de 5 kilos, y generalmente incluso menos de 3. ¿Cuál es el problema? Según explican veterinarios europeos y entidades de bienestar animal, criar perros buscando un tamaño excesivamente pequeño, es decir buscando la estética por encima de las consideraciones sobre su salud,lesocasiona graves problemas a estos animales, desde dolores de cabeza por la forma achatada de su cráneo a problemas oculares por la poca profundidad de sus órbitas.
El coste de la atención veterinaria suele superar con creces el precio de compra de estos perros pero, alertan, el precio más alto lo paga el propio perro, con una vida de sufrimiento.
"Los perros miniatura como los pomeranias, los chihuahuas y los caniches toy pueden parecer adorables y fáciles de manejar, pero su tamaño extremadamente pequeño les causa un gran sufrimiento. ¡No compres un perro miniatura!", este es el mensaje central de la campaña que han lanzado Caring Vets, FECAVA, Dier&Recht, DierenLot, Dierenbescherming, Royal Dog Protection (KHB) y Sophia-Vereeniging (SV).
Si no hay demanda, se dejará de criar a perros de tamaños extremos: "incluso un perro miniatura con pedigree puede tener problemas de salud", recalcan en la web que centraliza la información de esta iniciativa..
Por eso piden a las personas que eligen comprar perros (en vez de adoptar, agregamos desde SrPerro) que no se dejen llevar por las modas y se decanten por perros de tamaños superiores a los 5 kilos, que no compren nunca un perro sin informarse bien antes y, a ser posible, consultándolo con un veterinario.
La veterinaria Kelly Kessen, de la ONG holandesa Dier&Recht, explica:
"Sus diminutos cuerpos tienen dificultades para albergar sus órganos, y sus cráneos pueden ser demasiado pequeños para sus cerebros. Entre los problemas de salud más comunes se incluyen:
Hidrocefalia, malformación de Chiari y siringomielia, que provoca fuertes dolores de cabeza;
Trastornos oculares;
Problemas de rodilla y colapso traqueal;
Embarazos de riesgo que requieren cesáreas."
A pesar de sus instintos naturales de correr, jugar y explorar, los perros miniatura se enfrentan a constantes restricciones. La actividad física puede ser peligrosa y provocar fracturas, mordeduras mortales y estrés crónico. Los problemas de comportamiento, como ladridos y mordeduras excesivas, son frecuentes debido a la sobreestimulación y la frustración.
Muchos síntomas no son evidentes para sus familias: "Los veterinarios solo ven a los perros cuando están gravemente enfermos; para entonces, ya es demasiado tarde para evitarles el sufrimiento", explica la veterinaria Joyce Hofman.
- La foto que encabeza este texto es de Maarten Nauw.
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