Envidia sana, admiración, más envidia perruna y humana, alegría, ganas apagar el ordenador, coger al can y salir a explorar el mundo: algo así es lo que suele producir cualquier contacto con Bikecanine, el proyecto vital de Pablo Calvo Tuñon, un viaje perpetuo en buena compañía -la de su perra Hippie- que además es solidario. En una de sus rutas, una expedición en la que han cruzado media Europa en bici hasta llegar a Cabo Norte, también junto a la que fuera su pareja, Ana (Anina Anyway), eligieron recaudar fondos para la investigación sobre el cáncer de mama y consiguieron más de 3000€ en donaciones.
Esta entrevista se la hicimos a Pablo en 2016: desde entonces él ha seguido pedaleando en compañía de Hippie, a veces también junto a otros humanos, pero siempre compartiendo información útil para animar a otras personas a emprender nuevos viajes y aventuras junto a sus canes.
Si queréis estar al tanto de sus últimos viajes, lo mejor es seguirle en sus redes sociales, sobre todo en Youtube:
¿Qué es Bikecanine?
Una forma de ver la vida, creo. Así de sencillo. O de complicado. Esa aventura con la que tantos sueñan y pocos, poquísimos realizan.
Si entras en la web o en las redes sociales de Pablo -bombero en excedencia que se define como aventurero novato, ciclista solidario, fotógrafo aficionado y vegetariano- verás que es imposible no contagiarse de su energía positiva.
En su web podréis descubrir sus viajes pasados y sus aventuras actuales: pedaleando por una buena causa.
Las causas van cambiando pero no sus ganas de seguir adelante y de ayudar a otros en cada uno de sus viajes.
Pablo ha sido de lo más amable y ha contestado a las preguntas que le he enviado por mail porque hoy, me contaba, le tocaba descansar un poco: hace mucho, mucho frío en los bosques de Letonia, donde Hippie y él están en este momento.
- ¿Cuál es tu primer recuerdo perruno?
Cuando tenía unos 4 años, por navidades me regalaron un casete de Fisher Price en el que podías grabar sonidos y venía con cintas de música para niños.
Al empezar a experimentar con él, sonaban unos ladridos y me hizo gracia, lo extraño fue cuando al sacar la cinta esos ladridos seguían sonando…
Incluso llegué a quitarle las pilas a ese aparato, pero yo no lo entendía por qué los ladridos no paraban...
El misterio se resolvió cuando vi que en la habitación de al lado Papá Noel había dejado también un cachorrito :) Era una especie de caniche/perro de aguas, y juntos vivimos mil aventuras durante 15 años.
- ¿Por qué Hippie?
Pues elegí Hippie porque para mi es un sinónimo de libertad, paz, respeto por la naturaleza, armonía... Y porque ella era hippie (vivía en la calle) antes de que la recogieran en la protectora. :)
- Hippie está contigo desde chica, cuando la adoptaste, ¿siempre tuviste claro que te acompañaría en tus viajes? ¿Te costó enseñarla para ir tranquila en la bici?
Cuando la adopté, ella tenía más o menos un año y llevaba 6 meses en la protectora.
La elegí a ella para que fuera mi compañera en la vida, pero también en el trabajo.
Por aquel entonces era miembro de la Unidad Canina de Rescate del Principado de Asturias, una unidad de voluntarios profesionales dedicada a buscar personas desaparecidas en montaña o catástrofes y mi compañero en ese momento (Negrito) estaba empezando a hacerse mayor y se le acercaba la jubilación.
Me costó unas semanas de entrenamiento y mucha paciencia, pero yo en ese momento tenía muchos años de experiencia en el mundo del adiestramiento.
En la actualidad estoy preparando un libro con videos explicando cómo se hace para las personas que quieran viajar con su perro puedan hacerlo también.
- ¿Qué aspectos positivos/negativos destacarías de viajar con un perro como lo haces tú?
Te abre muchas puertas, pero también te las cierra.
Mucha gente se acerca a conocerte y hablar contigo, muchas de esas personas te ofrecen su casa o comida y algunas acaban siendo amigos para toda la vida, en cambio estás limitado a la hora de coger ciertos tipos de transporte, alojamientos o pasar fronteras.
- ¿Qué consejo le darías a alguien que se lo está planteando?
Que empiece poco a poco (mi primer viaje fueron 200 km en una semana) y que sobre todo, haga que disfrute el perro y tenga cuidado con él.
No todos los perros pueden correr 50 km en un día. Si tiene dudas que se ponga en contacto con un profesional (o conmigo) y que le cuide las almohadillas. 5 km mal hechos pueden servir para destrozárselas.
- Dices que Hippie es toda una guerrera, ¿por?
Es una perra durísima, puedo llevarla a cruzar Marruecos a 40º, a esquiar, a nadar, puede correr 100km en un día y jamás ha tenido un problema de salud.
- ¿Crees que conoces a más gente cuando viajas con perro? ¿Su presencia, hace un poco de “traductora” en países cuyo idioma quizá no hablas?
Sin lugar a dudas. Si existe Bikecanine es por ella, porque recibía tanta atención que decidí crear este proyecto para desviar esas miradas hacia una buena causa.
No puedes pasar desapercibido por una ciudad si llevar un perro de 20 kilos sobre tu rueda trasera :D
- Has viajado por España y ahora por media Europa: ¿notas diferencia en el trato hacia los perros?
Si, España y los países del sur de Europa tienen mucho camino que recorrer todavía en ese sentido.
Las cantidades de perros que se abandonan por aquí son una barbaridad, por no hablar del tema de los galgos…
Es algo inconcebible en otros países, pero creo que la sociedad cada vez se va concienciando más a no abandonar y a adoptar.
- ¿Alguna vez no has podido hacer algo por ir con Hippie?
Si, hace años, en mis primeros viajes recuerdo una tarde que llovía mucho. Estaba haciendo una parte del Camino de Santiago del norte, antes de llegar a San Sebastian. Estaba empapado y empezaba a anochecer así que decidí ir a un albergue de peregrinos para pasar la noche porque no tenía tienda de campaña.
Pero el hombre que regentaba el local, mal llamado hospitalero, me dejó en la calle. Fue muy cruel en las circunstancias en las que estaba.
Otra vez en Croacia se me rompió la bici y la tienda más cercana estaba a 180km, no me permitieron coger ningún tipo de transporte para llegar hasta ella y tuve que hacer esa distancia con la bici casi inservible.
Estas pequeñas cosas que nos van pasando, como se suele decir, no nos han matado, nos han hecho más fuertes. Hemos aprendido a no depender tanto de terceras personas y ser más autosuficientes.
- ¿Cómo eliges las causas para las que recaudas dinero?
Cada año lo hago de una manera diferente, porque me toca de cerca, por votación a través de mi página de Facebook, por ayudar a una causa que organiza un amigo… No tengo un patrón establecido.
- ¿T