"Antes de tener a mi perro guía, otra gente tenía que ocuparse de mí. Ahora soy yo el que tiene que aprender a ocuparse de mi compañero". Esto explica el protagonista de un interesantísimo reportaje documental sobre los perros guía en Hong Kong. Allí se calcula que de los 170.000 invidentes que viven en la ciudad, unos 1200 podrían mejorar su calidad de vida si pudieran tener a su lado un perro guía... pero sólo hay unos 30 perros guía en Hong Kong,y la gran mayoría aún están aprendiendo.
La historia de los perros guía en Hong Kong comienza en 2012... de ahí que aún sea una novedad este tipo de perro de asistencia. De hecho, el primer centro de entrenamiento se ha inaugurado el mes pasado, tras dos años tratando de encontrar un espacio en una de las ciudades más caras del planeta.
En todo Hong Kong sólo hay 4 perros guía en activo, trabajando y viviendo diariamente con sus humanos. Dada la densidad humana en esta gran metrópoli, el nivel de ruido y posibles distracciones, los canes tienen que aprender su labor en la propia ciudad y a ser posible desde cachorros para, realmente, poder ser los ojos de aquellos que lo necesitan.
Tal y como explica el protagonista del vídeo, a él le ha cambiado la vida radicalmente: antes, cuando iba con el bastón blanco, nadie quería ayudarle, ahora que se mueve en compañía de Range, su can, mucha más gente se acerca cuando él lo pide.
Pero también queda claro que es como si tuviera que educar a la sociedad constantemente: aunque reparta tarjetas explicando que el can está trabajando y no deben tocarle, la gente le ignora, le sacan fotos...
Una titánica e imprescindible labor la que llevan a cabo todos los perros guía de Hong Kong.
