Ni todos los humanos ni todos los perros les invade la felicidad en épocas navideñas. Hay mucho ruido, mucha gente en la calle, mucho niño y no tan niño tirando petardos o bombetas...Y luego está el árbol, el belén, los regalos... ¡esos regalos casposos que hay que agradecer como si fueran lo más de lo más!
Los canes no siempre comparten el sentido estético o las obsesiones peludas de sus humanos. Queda clarísimo en este vídeo: tiene unos añitos, eso salta a la vista, pero... es buenísimo.
Esta es la historia de una familia el día de NaviDOG, abriendo sus regalos junto al árbol, todos felices y contentos. Y entonces el padre abre una caja con algo peludo en su interior... No os lo perdáis.
Unos detectores de regalos casposos de primera categoría: Si vuestro can tiene este mismo espíritu grinch, ¡cuidado al abrir los presentes navideños! :-) Y es que no todos los perros o gatos son fans de la Navidad, está claro.
