Bongo tiene reuma y artrosis degenerativa y por eso necesita bañarse en el mar: ahí es donde puede hacer algo de ejercicio, el agua alivia sus dolores y mejora considerablemente su calidad de vida. Es muy similar a lo que le pasaba a Schoep, ese can cuya historia se hizo viral tras ver su foto flotando en brazos de su humano. En el caso de Bongo, en temporada baja no tiene problemas pero ahora, en verano, en Tossa de Marno hay playa canina y, por lo visto, aunque su dueña se levantaba al alba para que el perro pudiera disfrutar del agua cuando aún no había bañistas, alguien se ha quejado al Ayuntamiento y les han probhibido bajar a la playa. Incluso, según denuncian, amenazan con multarles...
La familia de Bongo está un tanto desesperada, este es el mensaje que han compartido hace un par de días en Facebook: "Ya han pasado 7 días sin que Bongo se pueda bañar en el mar, y a esto le sumamos que hace 1 día y medio que no come, dos días que no puede ni subir las escaleras de casa, y mucho menos caminar mas de 5 metros del seguido. Sólo pedimos una solución rápida y creemos que no es tan complicada, algún espacio en horarios acordados para nuestros compañeros y amigos de cuatro patas. Mientras esto tardan uestro Bongo cada vez está peor (... ) Decimos ya BASTA, no somos ni mejores ni peores que el resto de personas que no les gustan los animales, pero al menos no somos ni criminales ni delincuentes por tener un animal."
Más de 3000 personas se han sumado a su petición, puedes añadir tu firma pinchando aquí.
El consistorio, según recoge El Periódico,está al tanto de la situación y dicen estar estudiando opciones: "Nosotros entendemos la petición de la familia de Bongo, y es cierto que siempre han sido muy cuidadosos al llevarlo a la playa, pero las ordenanzas son para todos, y no permiten el baño de los animales. En el momento en el que alguien se queja porque él las cumple y otro no, nos pone en un serio aprieto".
Joan Capdevilla, el hijo de Sara, la dueña de Bongo, es quien está movilizando a las redes sociales para intentar hacer presión y que el Ayuntamiento modifique la Ordenanza.
Os animamos, sin duda, a firmar y a correr la voz con la etiqueta elegida por Joan: #TotsSomBongo
