Hay perros con complejo de Napoleón, como nos hicieron ver hace no mucho en un genial anuncio, pero luego... luego están los Chihuahuas y sus primos de Zumosol, los Gran Danés: las interacciones entre ambos suelen ser sorprendentes, divertidas y, también, tiernas.
Este es el momento en el que Duke, un Gran Danés, conoce a su "primo", el Chihuahua... La reacción es impagable, sobre todo sabiendo, como dicen sus humanos, que al menos se ha contenido un poco: el resultado cuando se topó con un pollito por primera vez fue ¡hacerse caca!
Y no es el único Gran Danés que se deja intimidar por el poder del Chihuahua: a Ellie su "primo chico" le quita su hueso y ella... mejor miradles en acción.
Pero no todo son rivalidades, también hay grandes amistades entre estas dos razas tan dispares: esta pareja parece no darse cuenta de la diferencia que hay entre ellos. Mejor, así se lo pasan en grande, como debe de ser.
Y seguro que os acordáis de estos dos: Lilly, la Chihuahua y Vago, el Gran Danés. Imbatibles. Su forma de jugar no puede ser más delicada.
Esta otra pareja es igual de divina: los cuidadosos movimientos del Gran Danés al jugar con Kitty, la chihuahua imparable son maravillosos.
Riley, este otro Chihuahua, lo tiene clarísimo: cuando hace frío, el mejor lugar de toda la casa es colocarse en la barriga de Appa, Gran Danés, aunque Appa no tenga ninguna gana de tener a un huesped en su regazo. Pero Riley sabe lo que quiere, el tamaño es lo de menos... salvo por lo calentito que resulta el regazo de un Gran Danés :-)
