Ubicado la ciudad de Brody, en el oeste de Ucrania, el albergue de animales Step se ha convertido en un santuario para animales que huyen de la guerra.
Llegan casi a diario desde las zonas de combate y aquí también se ocupan de animales en situación de calle o que han sido rescatados de situaciones de maltrato: hay más de 190 perros.
Hasta hace poco, los perros enfrentaban temperaturas bajo cero cada año, con solo casetas pequeñas y deterioradas o cobertizos ruinosos como refugio.
Los más vulnerables (los que se recuperan de una cirugía, tienen alguna discapacidad o están cuidando cachorros recién nacidos) se apilaban en espacios interiores limitados.
Pero ahora, gracias al apoyo de Naturewatch Foundation y a las donaciones de muchas personas, esta pequeña protectora se está transformando.
Tienen previsto construir 16 casetas diseñadas para que los perros puedan recuperarse y sentirse seguros mientras esperan una nueva familia.
Las tres primeras ya están terminadas y albergan a unos cuantos perretes: en una, una madre con sus cachorros, en las otras dos, perros heridos que necesitan un espacio para recuperarse.
A medida que avanza la construcción, explican desde Naturewatch Foundation, muchos más perros serán trasladados desde condiciones inadecuadas a espacios pensados para su bienestar, elevando así los estándares del bienestar animal en Ucrania.
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