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Un tribunal obliga a cortar las cuerdas vocales de un grupo de perros porque molestan a los vecinos

Un tribunal obliga a cortar las cuerdas vocales de un grupo de perros porque molestan a los vecinos

Última actualización del articulo el día 01/09/2017

Se llama cordectomía o desvocalización, dos términos que definen un procedimiento drástico y poco recomendable que está prohibido en la mayoría de países de la UE, salvo por razones veterinarias, y en al menos seis estados de EEUU. ¿Qué es? Pues es cortar las cuerdas vocales de los perros para silenciar sus ladridos con una intervención quirúrgica que requiere anestesia general. Esta semana, tres jueces de un tribunal de apelación de Oregón han exigido a una pareja que cría Mastines Tibetanos llevar a cabo la desvocalización de sus cinco perros tras prosperar la demanda impuesta por sus vecinos que se quejaban, desde hace años, por sus ladridos incesantes.

Para la pareja dueña de los mastines sus perros son "empleados" que trabajan con ellos para proteger a sus ovejas de los depredadores; no están ahí para fastidiar a nadie sino como guardianes. Para sus vecinos, sin embargo, los canes son una molestia constante desde hace muchos años.

El proceso judicial comenzó en 2002 cuando Karen Szewc y John Updegraff comenzaron a criar mastines y sus vecinos empezaron a quejarse por los ladridos que tenían que soportar: según indicaron en la demanda, a veces desde las 5 de la mañana, durante días... 

Así hasta que en 2015, tras un juicio con jurado, un juez decidió que Szewc y Updegraff debían pagar cerca de 240.000 $ a sus vecinos por una década de ladridos.

Esto no fue suficiente para calmar los ánimos de Debra y Dale Krein, los vecinos: ellos querían que cesara el ruido y ahora, de nuevo, los jueces les dan la razon.

El tribunal de apelación ha reiterado lo ya dictaminado: al considerar que el lugar donde viven los canes no es una granja se aplican normativas urbanas ydado que sus dueños no han hecho nada para evitar que los perros sigan ladrando insistentemente ahora deberán ocuparse de que un veterinario les corte las cuerdas vocales para que el ruido de sus ladridos no moleste.

Como es lógico, la decisión ha resultado muy controvertida y se ha montado un revuelo considerable: grandes protectoras como la Humane Society han mostrado su total rechazo e incluso hay una recogida de firmas en Change.org para que los tribunales no obliguen aplicar este tipo de sentencias. Casi  7000 personas se han sumado ya a la petición.

Aquí podéis ver cómo ladra un perro que ha pasado por una desvocalización.

PD: En España está prohibido desde hace muy, muy poco: cuando el Congreso ratificó, por fin, que España se adhería al Convenio Europeo sobre protección de Animales de Compañía. El texto, eso sí, deja cierto margen de maniobra a los veterinarios así que está prohibido, en teoría.