Las imágenes que ha compartido la Guardia Civil sucedieron el pasado mes de febrero: es el momento en el que un individuo tira dos bolsas dentro de un contenedor en Caspe, Zaragoza. En ellas había cuatro cachorrotes prácticamente recién nacidos.
La investigación comenzó en febrero, cuando agentes del SEPRONA (Servicio de Protección de la Naturaleza) del puesto de Caspe encontraron una publicación en una red social relacionada con un delito de abandono animal.
Las pesquisas realizadas en ese momento, explican, permitieron relacionar estos hechos con el hallazgo, por parte de un vecino, de cuatro cachorros de perro.
Los animales sufrían hipotermia e inanición, apenas podían moverse y tuvieron que ser atendidos por un veterinario en la próxima localidad de Alcañiz.
Los agentes inspeccionaron la zona y, gracias a las cámaras de seguridad, descubrieron las imágenes que muestran a un hombre llegando con su coche y arrojando dos bolsas a los cubos de basura.
Después de identificar el vehículo y a su propietario, se constató que esta persona tenía una perra que podía estar en edad de criar. Por ello, se localizó al animal y se le tomaron muestras de ADN, para poder comprobar si estaba emparentada con los cachorros.
Después de analizar las muestras, trabajo que se llevó a cabo en el laboratorio de medio ambiente del Servicio Criminalística de la Guardia Civil en Madrid, se comprobó que, efectivamente, la perra era la madre de los cachorros abandonados.
Después de recoger todas estas evidencias, finalmente el pasado 27 de abril se localizó al propietario de estos animales y se abrió una investigación por su supuesta autoría de un delito de abandono animal.
Así que puede que el análisis de ADN no sea muy eficaz para identificar a las personas que no recogen las cacas de sus perros, pero es perfecto para localizar a los individuos inhumanos que abandonan perros como si fueran basura.
¿Qué consecuencias podría tener para esa persona el haber abandonado a unos cachorros que casi mueren?
Según la Ley 7/2023, de protección de los derechos y el bienestar de los animales, el abandono de uno o más animales se considera una infracción grave. Las multas por este tipo de infracción oscilan entre 10.001 y 50.000 euros, dependiendo de factores como el número de animales abandonados y las condiciones en que se produjo el abandono.
Además de las sanciones administrativas, el Código Penal tipifica el abandono de animales vertebrados en condiciones que puedan poner en peligro su vida o integridad como delito. Las penas pueden incluir: multa de 1 a 6 meses, trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 90 días, Inhabilitación especial de 1 a 3 años para el ejercicio de profesiones, oficios o comercio que tengan relación con animales, así como para la tenencia de animales.
Te puede interesar