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Dermatitis Atópica Canina: qué es y cómo se trata

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Última actualización del articulo el día 30/03/2022

La Dermatitis Atópica Canina (DAC)es una enfermedad inflamatoria de la piel,una afección alérgica que afecta al menos al 10% de los perros.

Su origen es desconocido, pero se sabe que existe un componente genético importante y que el estado de la piel es un factor determinante en su aparición.

Compartimos una serie de consejos para saber cómo identificar y tratar esta afeccción de la mano de los expertos de Mi Mascota y yo.

¿Cómo surge y quién la sufre?

Los estudios de genética de la DAC sugieren que aproximadamente la mitad de los perros nacidos de padres atópicos desarrollarán la DAC.

Los alérgenos ambientales más comunes que se cree que están involucrados en la causa de esta afección son los ácaros del polvo doméstico, el polen y las esporas de moho. Las alergias alimentarias (de varios tipos posibles) también pueden contribuir a la afección

La DAC se presenta mayormente entre el primer y tercer año de vida y la enfermedad suele persistir durante toda la vida del animal.

En un porcentaje inferior al 25% es estacional y los síntomas se presentan únicamente durante unos meses al año, generalmente en primavera o verano.

Aunque no se conoce la causa exacta de la Dermatitis Atópica, se sabe que existen factores genéticos determinantes, por lo que encontramos una elevada predisposición racial.

Estas son las razas más predispuestas:

West Highland White Terrier 
Boxer
Labrador 
Golden Retriever
Springer Spaniel
Dálmata
Setter 
Pastor Alemán
Shar Pei 
Bulldog Francés


¿Cómo identificamos que nuestro can sufre DAC?

La característica fundamental de la Dermatitis Atópica Canina es el picor. Las lesiones primarias causadas por la reacción alérgica suelen localizarse en las zonas donde la piel es más sensible:cara, cara interna de los pabellones auriculares, cuello, axilas, ingles, abdomen, cara ventral de la cola, zonas de flexión de las extremidades y espacios interdigitales.

Al principio encontraremos zonas enrojecidas, granitos, descamación e irritación de la piel, pero si el problema avanza y el rascado persiste, las lesiones se agravan.

Además, la picazón en la piel puede hacer que el perro lama repetidamente las áreas afectadas, lo que puede hacer que la piel se oscurezca o se vuelva roja y en carne viva. A menudo podemos encontrar perros con otitis externa bilateral, conjuntivitis bilateral o infecciones secundarias por bacterianas o levaduras.

Hay múltiples causas -además de la dermatitis atópica- que pueden hacer que un perro desarrolle problemas en la piel: reacciones a productos químicos o plantas, sarna, infecciones bacterianas, alergias alimentarias o alergias a las pulgas... es por ello que el diagnóstico de CAD es a menudo un proceso de eliminación.

También es importante recordar que los perros también pueden desarrollar 'dermatosis psicógenas', donde la aparición de signos clínicos está relacionada con un evento/situación estresante. En este caso, rascarse o lamerse tiene una base emocional, en contraposición a las soluciones alergénicas y conductuales que deben buscarse.

¿Podemos tratar la Dermatitis Atópica Canina?

Hay que tener muy presente que se trata de una enfermedad crónica con un origen en el sistema inmunológico de nuestro perro que, por causas desconocidas, funciona de forma descontrolada.

No existe una “curación”, pero sí un buen número medidas que podemos adoptar para mejorar el cuadro clínico del animal, para aliviar la picazón y tratar de restaurar la barrera de la piel, siempre a través de un tratamiento individualizado, pautado por nuestro veterinario.  

Tratamiento de soporte:

   - Control estricto de parásitos externos para evitar complicaciones como por ejemplo la Dermatitis Atópica por Picadura de Pulga (DAPP).

    - Baños frecuentes con champú adecuado.

    - Alimentación de calidad, para garantizar una nutrición excepcional de la piel.

Medidas terapéuticas:

Cada caso debe ser estudiado de forma específica por un profesional veterinario, quien te podrá recomendar, entre otros tratamientos, la Inmunoterapia alérgeno específica o la administración de fármacos como los corticoides.

+ Información en el Itchy Dog Project the la Universidad de Nottingham