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Una investigación revela más de 50 muertes de perros al viajar en avión en EEUU

Una investigación revela más de 50 muertes de perros al viajar en avión en EEUU

Última actualización del articulo el día 19/10/2016

Dos periodistas deWorks For You se han dedicado a analizar las muertes de animales en los aviones de American, Delta, United y Southwest airlines, compañías que operan en la ciudad de Tulsa (sede de este programa de TV). Y el resultado no es particularmente tranquilizador: en tres años hay más de 50 muertes de perrosoficialmente contabilizadas, la mayoría causadas por neumonías, fallos cardiacos y síntomas relacionados con la ansiedad.

De todas las líneas aéreas investigadas sólo una no ha tenido ninguna muerte de perro en ese tiempo, Southwest. ¿La razón? Ellos sólo permiten perros en cabina, no en la bodega.

En tres años, en los vuelos de United Airlines murieron 25 perros, 17 en Delta y 9 en los de American.

Estos son todos perros que viajaban con sus familias, en estas cifras no se incluyen los perros que puedan ser enviados de una punta del país a otra por parte de criadores, tiendas, etc.

Es decir, previsiblemente el dato real sería más elevado.

A partir de 2015 ha cambiado la legislación en EEUU y ahora las líneas aéreas sí están obligadas a facilitar toda la información sobre todos animales muertos en los vuelos y, a diferencia de España, donde conseguir datos suele ser tarea hercúlea, allí sí hay acceso a los datos.

Da bastante miedo: no sólo hay perros muertos, también perros perdidos en el trayecto, igual que lo que sucedió en Barajas hace unos meses, aquí al menos -y gracias no a la línea aérea o al Aeropuerto sino a voluntarios de protectoras- con final feliz.

En EEUU estas son las cifras globales desde 2005:213 perros muertos, 129 perros heridos (6 de ellos de gravedad, 5 murieron y 1 tuvo que ser sacrificado), 12 perros perdidos de los que solo encontraron a 3.

En España nos enteramos de algunos casos, los que denuncian, los que llegan a los medios: como el de Nano, el can de Javier: a él le indemnizaron con 2635 euros. O Norah, la perra de Cristina: ambos murieron por golpe de calor.

Evidentemente, lo que importa no es la indeminzación sino la seguridad, el saber que si eliges volar junto a tu perro y debe hacer el viaje en bodega puedes estar tranquilo... yo, la verdad, no lo tengo nada claro.