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La historia de un buen hombre, el emprendedor perruno

La historia de un buen hombre, el emprendedor perruno

Última actualización del articulo el día 19/10/2016

Lester Hiew es un joven de Malasia al que siempre le han gustado los perros. Con ocho años, cuenta su madre, rescató a su primer can, un cachorrito que estaba abandonado en la calle. Y siempre lo tuvo claro: tenía que convertirse en empresario para tener así la posibilidad de ayudar a más perros.

Lester, con solo 22 años, es un emprendedor con alma perruna. Su universidad le ha dedicado este reportaje, un vídeo en el que relatan su trayectoria como activista perruno.

Él ha fundado una protectora llamada A Dog's Life y en paralelo ha creado su empresa, la empresa que justamente le permite seguir rescatando a canes de la calle en Malasia, un país donde ser perro es aún más complicado que en otros lugares de la tierra. 

Los canes en Malasia, país mayoritariamente musulmán, son considerados impuros. Eso tiene sus consecuencias: el mes pasado, por ejemplo, se organizó un evento que animaba a "tocar a perros": la iniciativa buscaba, justamente, romper esa barrera anti canes y mostrar otro tipo de relación con los perros.

Fue todo un éxito, muchísima gente acudió a I Want to Touch a Dog y la noticia se fue difundiendo en las redes sociales... y entonces empezaron los problemas. Los líderes musulmanes definieron el evento como una ofensa para el Islam, cuentan en el New York Times. Y el organizador sigue recibiendo amenazas y todo tipo de insultos por haber permitido que jóvenes musulmanas abrarazar y tocaran a los perros.

Así que en ese tipo de comunidad, el trabajo de Lester es aún más importante. Y su madre, además, está muy orgullosa de él :-)