Eddie se hizo famoso a comienzos de año y no fue, precisamente, por ser el más simpático del lugar sino por todo lo contrario. Este pequeño can estaba en una protectora, en la Humane Society Silicon Valley: encantador con humanos, perfectamente educado pero, peeeero, un absoluto gremlin si se cruzaba con cualquier otro perro, de cualquier tamaño, raza y condición. Un claro caso de Dr Jekyll & Mister Hide, versión canina. Y en vez de ocultarlo y arriesgarse a una adopción frustrada... hicieron lo contrario.
Resulta que por alguna razón, Eddie tenía un marcado problema de sociabilidad: se ponía cual gremlin o como un zombie de los de Walking Dead en cuanto se cruzaba con cualquier can. Y tampoco le hacían mucha gracia los niños pequeños.
En la protectora hablado con educadores y habían intentado diversas soluciones sin éxito: su comportamiento complicaba, obviamente, tanto la posible adopción del can como su estancia en un lugar donde hay... muchos perros, la protectora.
Eddie tenía que ir con bozal para evitar que pudiera morder a otro can.
¿Qué hacer? Pues, le echaron imaginación y armaron una campaña de adopción muy especial (de hecho ha ganado un premio).
Le dedicaron un post y un par de vídeos hilarantes, para "vender" la opción de adoptar a Eddie con total franqueza y una buena pizca de sentido del humor. Sin ocultar ninguno de sus problemas sino, casi, amplificándolos.
El post se titulaba "Tres razones por las que no quieres adoptar a Eddie el Terrible"
El resumen: Eddie puede ser un amor de can pero socialmente es un desastre, no se lleva bien ni con otros canes ni con niños. ¿Quieres conocerle? ¿Te atreves? Pues no digas que no te avisaron...
La historia de Eddie se hizo viral, sus vídeos causaron tanta sorpresa como sonrisas. ¡Funcionó!
Mucha gente se sintió identificada con los problemas de Eddie porque muchos dueños de perro aceptan que aunque sus canes sean adorables y unos angelitos en casa, pueden tener sus más y sus menos en según qué situaciones.
No son perfectos.
Eddie se hizo famoso y, lo más importante, encontró una familia: sí, fue adoptado por una pareja dispuesta a tener la paciencia necesaria para que este personajazo encajara en sus vidas y estuviera a gusto.
La adopción ha sido todo un éxito. Eddie ha mejorado muchísimo en el año y pico que ha pasado con su nueva familia.
A ver, tal y como explican en la protectora donde Eddie ha vuelto de visita- no es que ahora sea el perro más sociable del mundo mundial pero está mucho más relajado y puede interactuar sin intentar comerse a todos los canes.
Se le ve feliz.
Es un gran apoyo para su nueva familia y, de hecho, se ha convertido oficialmente en perro de apoyo emocional para su dueño.
Los perros de apoyo emocional no son perros de terapia ni reciben ningún tipo de educación especial, pero sí tienen un estatus diferente al de otros canes porque se considera que su presencia junto a sus dueños es crucial para ese humano. Son como muletas emocionales para individuos que tienen algún tipo de problema psicológico o emocional.
La historia de Eddie me resulta interesante en muchos niveles, uno de ellos es ese esfuerzo extra que hacen algunos por adoptar a perros considerados 'complicados'.Como los que deciden adoptar a canes mayores o a perros con algún tipo de problema físico.
Y otro, sin duda, es la interesante y eficaz estrategia seguida por la protectora:mejor decir la verdad sobre un perro con problemas y lograr que su familia adoptiva sea su familia definitiva.
No sólo lograron que Eddie fuera adoptado por la familia idónea sino que la atención mediática también sirvió para generar más fondos que ayudarán a los canes que aún esperan encontrar un hogar.
También mencionan en el post que otras protectoras les han contactado tras emular la idea de "Eddie el Terrible" con canes problemáticos que llevaban mucho esperando un hogar. Y, sí, ¡han tenido éxitos considerables!
¿Qué os parece? ¿Si viérais un anuncio como el de Eddie cuando buscaba familia, os interesaríais por él?
