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Algo se mueve de forma tentadora ante la nariz de un cachorro como diciendo 'atrápame'... Normal que este can esté convencido de que ha encontrado el mejor juguete del universo... Claro que el dueño del juguete, posiblemente, no opinará lo mismo.
Algo parecido a lo que le pasó a este gatito... demasiada tentación.
Los hay que se lo pasan en grande persiguiendo su propia cola. Para los cachorritos es todo un descubrimiento...
Y otro Samoyedo con la misma costumbre pero... con resultado diferente. Por cierto, este comportamiento puede llegar a ser el síntoma de algún problema si el can lo hace de forma obsesiva: en ese caso, lo mejor es hablar con un veterinario -por si se debiera a alguna causa física- y una vez descartada esa hipótesis, con un educador canino.
