Una joven pareja convive con un Shiba Inu, son una familia en apariencia feliz. Entonces ella se queda embarazada y el perro, su compañero, se convierte en un estorbo. Esa es la premisa de este vídeo, un cortometraje que sirve como denuncia y como aviso, un vídeo que ha sido visto más de un millón de veces ya y que pretende evitar el abandono de canes y que pone voz e imágenes a un suceso que no es infrecuente, por mucho que parezca imposible entenderlo. Humanos inhumanos y animales... animales que sufren las consecuencias. Aquí el perro, perdido y solo, busca a sus dueños, con los que compartió tantos momentos felices.
La decisión de compartir tu vida con un can no debería tomarse a la ligera nunca. No todo el mundo está preparado para tener perro, no todo el mundo debería tener perro... Y desde luego nadie, nadie debería abandonar a un animal en la calle como si fuera un trasto.
¿Que llega un bebé? Seguro que tu can y tu niño se harán grandes amigos y disfrutarán el uno del otro. Esa misma experiencia nos contó isasaweis, la conocida bloguera: su SraPerra adoptada y su hijo son inseparables, un mensaje importante que ella consigue llegue a mucha más gente.
No hay excusa para hacer algo así. "Nunca digas adios", así se llama este cortometraje que es parte de una campaña de Purina para dar visibilidad a los canes abandonados, para fomentar la adopción y evitar que algo así pueda suceder.
¿Hice algo mal? se pregunta el Shiba Inu que protagoniza el corto... ¡Cómo me gustaría que me volviérais a pasear, papá y mamá!
Luego se adentra en la ciudad, ese gran parque lleno de posibles aventuras que pronto empieza a parecerle menos divertido. No le gusta la comida de la calle, no le gusta estar solo. Y aunque hay gente que se acerca a ayudarle, que se interesa por él e incluso le ofrece un hogar, él sólo quiere volver con sus humanos, con esa familia con la que compartió tantos momentos felices.
Aquí tenéis el corto con subtítulos en castellano:
Sí, es sólo un corto pero refleja una realidad habitual en todo el mundo, por desgracia. La de esos perros que son comprados y desechados sin más: cuando llegan las vacaciones, cuando llega un bebé, cuando crecen demasiado, cuando sus dueños se dan cuenta de que no son juguetes o cuando descubren que a un perro hay que educarlo y eso lleva tiempo...
Antes de compartir tu vida con un perro, con un ser que siempre querrá estar a tu lado y que te hará reír y llorar, que te hará salir a la calle cuando llueve y te obligará a cancelar cenas con tu futura pareja o con los amigos, que te causará gastos inesperados y quebraderos de cabeza, piénsalo mucho. Es para toda su vida.
