Este can es optimista por naturaleza y claramente un maestro zen porque lo suyo va a requerir mucha, mucha paciencia. Anda que no le queda hasta que sus amigos humanos puedan hacer lo que él quiere que hagan pero él, oye, está más que dispuesto a entrenarles :-)
Aquí comienza el "adiestramiento perruno" de dos gemelos sonrientes... seguro que en el futuro serán grandes amigos de este perro juguetón.
No es la primera vez que vemos a un perro enseñando a su humano a jugar... este otro salchicha es igual de genial (o más).